Por los pelos

El otro, al terminar de cenar, la TV informaba de controles de alcoholemia en las carreteras. En concreto, el control era sobre las siete de la mañana de un Domingo. Lógicamente, pillaban a todo quisqui con una copita de más. Hasta que llegó uno, al que el guardia civil al comprobar el indicador de alcoholemia de una jovencita, le dijo "te has salvado por los pelos".

Inmediatamente, me giré y a un grupo de amigas le dije: "Véis, no es bueno pelársela del todo. Conviene dejarse al menos un flequillito. Hace más bonito y la guardia civil, así, ya tiene un motivo para no denunciaros"